Si busca un lugar especial donde parar a tomar una copa puede pensar en Backdoor43. Con sus 4 metros cuadrados y 4 asientos se gana el primer puesto como el bar más pequeño del mundo. Para sentarse, por supuesto, hay que reservar con antelación y si se llega cuando está lleno, el cóctel se sirve a través de un agujero en la pared y se bebe de pie fuera.
Si no lo conoce, puede pasar desapercibido. Al ser el bar más pequeño del mundo, apenas se ve desde fuera. Una pequeña puerta de madera donde antes estaba el estudio de un pintor.
Backdoor43 cuenta con una excelente colección de whiskies añejos (más de 200 etiquetas). Al entrar, uno se siente como en otra época, en la era de la Ley Seca americana, en los bares clandestinos de los años 20, como los de la Gran Manzana estadounidense.
Backdoor43: cómo entrar en el bar más pequeño del mundo

Que es mejor reservar, ya lo hemos dicho, puedes estar como mucho una hora. Si estás de paso puedes tomar para llevar eligiendo de una lista que tiene 8 cócteles, no se admiten fuera de carta. El cóctel se entrega a través de una pequeña ventanilla por la que la única interacción se produce entre tú y el barman cuyo rostro queda oculto al llevar la máscara de Guy Fawkes, símbolo de la rebelión y protagonista de la película V de Vendetta.
Lo curioso es que dentro de Backdoor43 todo está permitido, o casi. Tienes un barman a tu entera disposición, puedes elegir la lista de reproducción de música que prefieras y si te apetece bailar y cantar a pleno pulmón, puedes hacerlo porque durante esa hora el bar queda completamente a disposición de quienes lo reserven.
Backdoor43 no es sólo el bar más pequeño del mundo, sino toda una experiencia. Para reservar entra en la página web y regálate una velada única.
¿Dónde estamos? En Ripa di Porta Ticinese, 43