Si está buscando su próximo destino de vacaciones, puede plantearse venir aquí. A unas 3 horas de vuelo desde Milán se encuentra la isla de la eterna primavera, en el océano Atlántico, parte del archipiélago portugués. Un verdadero paraíso terrenal tan exuberante y floreciente que ha recibido el sobrenombre de«jardín flotante«. Un lugar natural donde el clima es siempre favorable en cualquier época del año debido a su ubicación. Está a sólo 500 km de la costa de África.
Antes de desvelar de qué isla estamos hablando, un par de detalles más. Las horas de viaje dependen del vuelo que cojas, no hay directo sino que tienes que hacer escala en Oporto o Lisboa y esto puede ser bastante largo. En sí, Milán Oporto o Lisboa son un par de horas y de Portugal a la isla en cuestión, otro par. Así que incluso un corto viaje, si no hubiera las escalas para que sea menos suave. Pero sigue siendo un destino bastante fácil de llegar. Las compañías aéreas a considerar son Easyjet, Ryanair, Tap Air Portugal, Iberia, Lufthansa, Swiss, ITA, KLM, Eurowings, Volotea y otros. En resumen, hay donde elegir. Empieza en Malpensa.
A la isla de la eterna primavera portuguesa se puede llegar desde Milán
Llegados a este punto, conviene desvelar el nombre de este idílico lugar. La isla de la eterna primavera de Portugal a la que se puede llegar desde Milán es Madeira. Y usted dirá. ¿Por qué Madeira? Hay tantos lugares hermosos a los que llegar desde Milán. Cierto. Pero en Secret Milano nos gusta dar consejos de viajes en general, cierto que hay un sinfín de lugares, igual que hablamos del vuelo Milán Tokio o del Círculo Polar Ártico, ahora nos trasladamos a la calidez de Madeira.
Es una isla perfecta para los amantes del senderismo por la riqueza de sus senderos de montaña. También son dignas de mención las levades, canales característicos utilizados para el riego y construidos por los habitantes en el siglo XVI. Madeira es una isla rica en agua y por tanto muy verde, le impresionará su vegetación. Bosques, cascadas, pueblos de cuento por descubrir, Madeira encanta a cada paso.
Si luego sube a la cima de una montaña, como el Pico de Ruivo, con sus escaleras que parecen conducirle al paraíso, podrá admirar un panorama que permanecerá indeleble en su corazón y en su mente. Y Madeira también es especial en cuanto a comida y vino, con sus excelentes productos locales para disfrutar. El pescado, la fruta y el vino recomendados para probar.
Si le hemos convencido, sepa que la mejor época para ir de vacaciones es el otoño, es más barato y no hay las aglomeraciones que llenan las playas en verano, por lo que podrá disfrutar de la autenticidad de una isla mágica. Ah, no necesita pasaporte.