El Palacio Ducal de Mantua es uno de los conjuntos monumentales más grandes y fascinantes de Europa, símbolo del poder y el refinamiento de la ciudad de los Gonzaga. Situado entre la plaza Sordello y las orillas del Lago Inferiore, el palacio ocupa más de 34.000 metros cuadrados, con más de 500 habitaciones, 15 jardines, plazas y patios. Es una «ciudad dentro de la ciudad».
Sólo este sábado 17 de mayo de 2025, con motivo de la Noche de los Museos, el Palacio podrá visitarse por la noche hasta las 22.15 horas, con una entrada «especial» de sólo 1 euro, a la venta a partir de las 18.40 horas.
Este año vuelve la visita temática acompañada «Tras las huellas de Isabel», un recorrido de una hora para explorar los lugares de Isabel. Las salidas previstas son a las 19.30 y a las 20.30 horas. Es obligatorio reservar en el infopoint: tel. 0376 352100, de martes a domingo de 8.30 a 13.30 h.
Un poco de historia
El Palacio Ducal se compone de varios núcleos históricos: la Corte Vecchia, el Castillo de San Giorgio, la Corte Nuova.
La historia del Palacio hunde sus raíces en el siglo XIII, cuando fue construido por la familia Bonacolsi. Con la llegada de los Gonzaga en 1328, el complejo se amplió y embelleció gradualmente, convirtiéndose en la residencia oficial de la dinastía que gobernó Mantua hasta 1707. Cada generación de los Gonzaga aportó nuevos edificios y obras de arte.
Isabel de Este es una de las figuras más famosas e influyentes relacionadas con el Palacio Ducal de Mantua. Se casó con Francesco II Gonzaga en 1490 y, a su llegada a Mantua, vivió inicialmente en un piso del piano nobile del Castello di San Giorgio, donde hizo construir el famoso Studiolo y la Grotta, espacios dedicados al arte, el estudio y la contemplación.
Tras la muerte de su marido en 1519, Isabel se trasladó a la Corte Vecchia.
En la actualidad, el Palacio Ducal es un museo estatal que alberga obras maestras del arte, como frescos, tapices flamencos, obras de Rubens y Mantegna, y testimonios de la vida cortesana renacentista.