Tabla de contenidos
- Montecampione – Provincia de Brescia
- Bormio – Provincia de Sondrio
- Ponte di Legno – Provincia de Brescia
- Monte Pora – Provincia de Bérgamo
- Pian delle Betulle – Provincia de Lecco
- Passo del Tonale – Provincia de Brescia
- Colere – Provincia de Bérgamo
- Paso de San Marco – Provincia de Bérgamo
- Madesimo – Provincia de Sondrio
- Gromo – Provincia de Bérgamo
- Monte Resegone – Provincia de Lecco
- Aprica – Provincia de Sondrio
- Foppolo – Provincia de Bérgamo
- Piani dei Resinelli – Provincia de Lecco
¿Está buscando una escapada del ajetreo de Milán, ansioso por respirar aire fresco y sumergirse en unas vistas impresionantes? Buenas noticias: cerca de Milán hay multitud de estaciones de montaña dispuestas a ofrecerle experiencias inolvidables.
Tanto si eres un entusiasta del esquí, un amante de las raquetas de nieve o simplemente buscas un acogedor refugio de montaña donde disfrutar de las especialidades alpinas, las montañas lombardas tienen todo lo que necesitas para saciar tu sed de aventuras.
La nieve cerca de Milán no es un espejismo: en poco más de una hora, puede estar en el corazón de los Alpes, con los esquís en los pies o las raquetas de nieve atadas.
Y para los que prefieren una excursión más tranquila, no faltan rutas panorámicas aptas para todas las piernas, con la promesa de un sabroso almuerzo en un pintoresco refugio de montaña como recompensa.
Descubramos juntos 14 destinos ineludibles para su próximo fin de semana en las montañas cercanas a Milán, donde naturaleza, deporte y relax se funden en un abrazo regenerador.
Montecampione – Provincia de Brescia
Montecampione está a 116 kilómetros de Milán. Es el lugar perfecto para pasar un fin de semana en la nieve con unas vistas impresionantes del lago de Iseo. Hay 80 km de pistas: 5 negras, 11 rojas, 11 azules y 6 verdes. A quienes no les guste esquiar pueden organizar otras actividades en la naturaleza, descubriendo el Valle Camonica, que se ha hecho famoso por sus grabados rupestres. Montecampione también permite acceder fácilmente a los baños termales de Boario.
Además, en la zona hay tiendas, pubs, pizzerías, un cine y un teatro para entretenerse.
Bormio – Provincia de Sondrio
Bormio, conocida estación de esquí cercana a Milán, le conquistará con su encanto alpino y sus aguas termales. A unos 200 km de la capital lombarda, esta joya de la Valtellina ofrece pistas de esquí para todos los niveles, vistas impresionantes y la posibilidad de relajarse en sus famosos baños termales tras un día en las pistas. No se pierda la oportunidad de explorar el casco antiguo medieval y degustar los auténticos sabores de la cocina valtellina.
Ponte di Legno – Provincia de Brescia
Ponte di Legno es una conocida localidad turística. Se encuentra a 171 kilómetros de Milán y es el municipio más septentrional del Valle Camonica y de la provincia de Brescia. La zona de esquí de Pontedilegno-Tonale ofrece diversión para esquiadores de todos los niveles y edades. Pero también hay otras actividades que probar en la nieve, como trineos tirados por perros, fat bike, snowkiting y esquí de fondo (Ponte di Legno cuenta con una pista de 10 kilómetros). También es agradable la excursión a Val Sozzine, a la que se puede llegar a pie.
Monte Pora – Provincia de Bérgamo
El macizo de los Prealpi Bergamasche (1.880 m de altitud) es el destino ideal para un fin de semana familiar en la nieve. Se encuentra a 100 km de Milán. Hay seis pistas abiertas y se pueden alquilar esquís, snowboards, raquetas de nieve y otros equipos in situ para disfrutar al máximo de la aventura. También hay snow tube: el donut que se desliza por la nieve.
Pian delle Betulle – Provincia de Lecco
Entre las estaciones de esquí más pequeñas de Lombardía se encuentra Pian delle Betulle, situada en Valsassina, a unos 90 km de Milán. Esta estación de montaña es un verdadero balcón natural sobre los Prealpes lombardos y una encantadora zona de esquí que a menudo se pasa por alto debido a su proximidad a la más famosa Piani di Bobbio (por lo que en fines de semana ajetreados en Bobbio, esta zona de esquí podría ser una buena alternativa).
Se puede llegar a ella desde Margno en un histórico teleférico que ofrece espléndidas vistas. La Skiarea cuenta con dos remontes principales: un telesilla que sube hasta los 1.700 metros, con dos pistas rojas (Bosco y Presepe) y una negra (Morosoi), y el remonte Cimone, que alcanza el punto más alto a 1.797 metros. Además de esquiar, podrá disfrutar de paseos por los bosques de abedules, picnics en los prados floridos y emocionantes descensos en bicicleta de montaña.
Desvíese también hacia el Rifugio Ombrega y no olvide probar los quesos locales, una auténtica delicia de Valsassina.
Passo del Tonale – Provincia de Brescia
El Passo del Tonale, situado a unos 200 km de Milán, es una garantía para los amantes de la nieve. Este paso alpino, que une Lombardía y Trentino, ofrece una temporada de esquí especialmente larga gracias al glaciar de Presena. Aquí se puede disfrutar de pistas para todos los gustos, desde el esquí alpino hasta el snowboard, sin olvidar las emocionantes excursiones con raquetas de nieve. Passo Tonale es también un excelente punto de partida para explorar el Parque Nacional del Stelvio.
Colere – Provincia de Bérgamo
A 112 kilómetros de Milán, Colere es otra estación a tener en cuenta para pasar un fin de semana en la nieve. El dominio esquiable de Colere comprende cuatro pistas rojas y dos negras. Este municipio es famoso sobre todo por el esquí alpino en invierno, aunque en verano es un destino popular para los senderistas. Desde el pueblo se puede llegar al Refugio Luigi Albani.
Paso de San Marco – Provincia de Bérgamo
El Paso de San Marcos, situado a unos 100 km de Milán, en la frontera entre las provincias de Bérgamo y Sondrio, es un lugar cargado de historia y belleza natural. Este paso alpino, conocido como la «Puerta de Valtellina«, ofrece impresionantes vistas de los Alpes Orobios y una naturaleza aún salvaje y virgen. Es el punto de partida ideal para excursiones de diversa dificultad, incluido el sendero que conduce al pintoresco lago Pescegallo. Los aficionados a la historia apreciarán las huellas de la antigua Via Priula, una ruta comercial del siglo XVI que conectaba Bérgamo con Valtellina. En invierno, el puerto se convierte en un paraíso para los amantes del esquí de fondo y las raquetas de nieve.
Madesimo – Provincia de Sondrio
Si busca nieve en Lombardía, Madesimo es la respuesta. Situada a sólo 140 km de Milán, esta perla del valle del Valchiavenna es un auténtico paraíso para los amantes de los deportes de invierno. Con más de 60 km de pistas y un snowpark de última generación, Madesimo ofrece emociones para todos, desde principiantes hasta expertos. No olvide probar la emoción del esquí fuera de pista o las raquetas a la luz de la luna para vivir una experiencia inolvidable.
Gromo – Provincia de Bérgamo
Gromo es uno de los pueblos más bonitos de Italia y se encuentra a 96 kilómetros de Milán. El territorio de este pueblo, dentro del Parco delle Orobie, es rico en rutas de senderismo que permiten admirar la belleza de la naturaleza tanto en verano como en invierno. En verano, podrá descubrir canteras, minas, molinos y fraguas.
En invierno, en cambio, se pueden practicar deportes de invierno en las pistas de Spiazzi di Gromo, una estación de esquí bastante conocida en Lombardía. Hay nada menos que 9 pistas (15 km) que se diferencian por el desnivel del terreno para que cada uno pueda elegir un recorrido según su nivel personal: 4 fáciles, 2 medias y 3 difíciles.
Monte Resegone – Provincia de Lecco
El monte Resegone, con su característica silueta de dientes de sierra que domina Lecco, es un destino obligado para los senderistas de montaña. A sólo 80 km de Milán, este macizo ofrece senderos para todos los gustos, desde el tranquilo paseo hasta los Piani d’Erna, a los que también se puede llegar en teleférico, hasta la ascensión más exigente a la cumbre, Punta Cermenati, a 1.875 metros. No se pierda la oportunidad de visitar el Rifugio Azzoni en la cumbre, donde podrá degustar platos típicos con una impresionante vista del lago de Como y la llanura lombarda.
Aprica – Provincia de Sondrio
Con sus paisajes, excursiones, visitas guiadas y todo el encanto de la Valtellina, Aprica le espera a sólo 175 km de Milán. Se trata sin duda de una de las estaciones de montaña más populares cerca de la capital lombarda para esquiadores de todos los niveles. Con sus pistas en buen estado y su impresionante panorama de los Alpes Orobios, ofrece una experiencia invernal completa. Pero Aprica no es sólo esquí: en verano, se convierte en un paraíso para los amantes del senderismo y la bicicleta de montaña. No se pierda la oportunidad de visitar el Observatorio de la Ecofauna Alpina para conocer de cerca la fauna local. Y si le gusta el senderismo o la búsqueda de setas, ¡una vez más éste es su lugar!
Foppolo – Provincia de Bérgamo
A sólo 90 km de Milán, Foppolo es uno de los lugares más accesibles de las montañas cercanas a Milán para un fin de semana de aventura o relax. Esta estación de Val Brembana ofrece pistas de esquí para todos los niveles, pero también es un paraíso para los amantes de las raquetas de nieve y el esquí de fondo. En verano, Foppolo se convierte en un punto de partida ideal para excursiones al descubrimiento de la belleza natural de las Orobie, con senderos aptos para todas las piernas.
Piani dei Resinelli – Provincia de Lecco
Concluimos nuestra lista con los Piani dei Resinelli, quizá la montaña más cercana a Milán, a sólo 70 km del centro de la ciudad. Esta meseta ofrece vistas espectaculares del lago de Como y Brianza, y es el punto de partida ideal para excursiones de dificultad variable por la Grigne. En invierno, podrá disfrutar de fáciles paseos con raquetas de nieve, mientras que en verano es el paraíso de los escaladores. No olvide visitar el característico Rifugio Porta para degustar los platos típicos de la tradición montañesa lombarda.