Tabla de contenidos
Si hay un plato que encarna la esencia de la cocina milanesa, ése es sin duda el ossobuco. Este estofado de ternera, cocinado lentamente hasta quedar tierno y sabroso, es un auténtico alimento reconfortante que conquista el paladar de cualquiera que lo pruebe.
Pero ¿sabía que este suculento trozo de carne tiene una historia casi tan larga como el Duomo? Se dice que la receta del jarrete de ternera con tuétano nació por casualidad en el siglo XV, cuando un posadero milanés, que se había quedado sin carne fina, decidió cocinar el jarrete de ternera a fuego lento.
De tradición campesina, este plato se preparaba con ingredientes sencillos y genuinos (harina, mantequilla, caldo, vino blanco, cebolla, zanahoria, apio y la famosa «gremolada», una mezcla picada de perejil, ajo y ralladura de limón), pero hoy el ossobuco se ha convertido en un símbolo de la gastronomía milanesa.
Por eso, si está en Milán y se pregunta dónde comer el mejor ossobuco, ¡ha llegado al lugar adecuado!
En este artículo, le llevaremos a descubrir 10 trattorias milanesas donde podrá degustar este delicioso plato, quizás acompañado de un inigualable risotto milanés.
Trattoria Milanese – Desde 1933
Un restaurante clásico situado en el corazón de Milán. Aquí el ossobuco se deshace en la boca y se sirve con un risotto cremoso, perfecto para saborear hasta la última gota de salsa. Los clientes aprecian el ambiente acogedor y el servicio amable, que hacen de cada visita una experiencia memorable. No deje de probar también su famosa gremolada, que realza el sabor de la carne.
Dirección: Via Santa Marta, 11, 20123 Milán
Trattoria Masuelli San Marco
Esta trattoria histórica es un verdadero santuario del ossobuco. Desde 1921, Masuelli San Marco deleita los paladares con una cocina lombardo-piamontesa de altísima calidad. Su ossobuco es sencillamente divino: carne tierna y suculenta servida con risotto alla Milanese cremoso y al dente. A la altura de una de las mejores chuletas de «oreja de elefante», otro plato típico milanés que podrá probar aquí. El ambiente acogedor y familiar le hará sentirse como en casa de la abuela.
Dirección: Viale Umbria, 80, 20135 Milano MI, Italia
Antica Trattoria della Pesa
Uno de los restaurantes más antiguos de Milán, la Antica Trattoria della Pesa es un referente de la cocina milanesa desde 1880. Su Oss Büss con risotto milanés es un clásico atemporal, preparado según la receta tradicional. La carne se desprende del hueso con una facilidad desarmante, mientras que el risotto es un derroche de sabores y colores. Como homenaje de la casa, se sirven 2 mondeghili por comensal. No se pierda el zabaglione caliente de postre.
Dirección: Viale Pasubio, 10, 20154 Milán
Al Matarel
Desde 1962, la «sciura» Elide es la guardiana de la auténtica cocina milanesa. En Matarel, el ossobuco es una experiencia casi mística. La carne está cocinada a la perfección, el risotto es all’onda como manda la tradición, y la gremolada añade ese toque de frescura que equilibra perfectamente el plato. Entre los clientes más famosos de este típico restaurante milanés se encontraba Bettino Craxi. Después de comer, le recomendamos un paseo por el centro para eliminar las calorías.
Dirección: Via Laura Solera Mantegazza, 5, 20121 Milán
Osteria Conchetta
En esta acogedora osteria milanesa cerca del canal Naviglio Pavese, el ossobuco es una verdadera obra maestra. La carne es tan tierna que se puede cortar con un tenedor, mientras que el risotto alla milanese es cremoso y lleno de sabor. Te alegrará saber que las raciones son realmente generosas. También recomendamos probar el arroz mantecato al queso grana. El ambiente informal y el servicio amable hacen de Osteria Conchetta el lugar perfecto para una cena con amigos.
Dirección: Via Conchetta, 8, 20136 Milán
Premiata Trattoria Arlati desde 1936
Este restaurante es famoso no sólo por su larga historia, sino especialmente por su ossobuco, considerado uno de los mejores de Milán. Según la tradición, la carne se cocina lentamente durante horas, quedando increíblemente tierna y sabrosa, con una salsa rica y aromática, perfecta para acompañar con un cremoso y fragante risotto alla Milanese. También hay una excelente selección de vinos locales, que combinan a la perfección con los platos de la cocina lombarda.
Dirección: Via Alberto Nota, 47, 20126 Milán
La Pobbia 1850
La Pobbia 1850 es un restaurante histórico que ofrece un ossobuco (tuétano de ternera) excepcional, preparado según los dogmas de la auténtica y sabrosa cocina milanesa. Su tuétano de ternera al horno es tierno y se deshace en la boca, mientras que la rica salsa se prepara con ingredientes frescos y de alta calidad. Quienes han comido aquí también elogian el cremoso y equilibrado risotto a la milanesa, que acompaña perfectamente el plato. El ambiente rústico y el servicio atento hacen de cada visita una experiencia auténtica y satisfactoria.
Dirección: Dirección: Via Gallarate, 92, 20151 Milán
Guyot
Risotteria y vinoteca a dos pasos del barrio de Isola, abierta en 2009. Suave ossobuco, sencillamente excelente, protagoniza junto a una amplia selección de vinos. Risotto alla Milanese realmente exquisito, perfectamente batido, arroz al dente y con el punto justo de sabor. El sumiller sabrá recomendarle el vino adecuado para la combinación perfecta de sabores. Ambiente cálido y sofisticado, personal amable y bien informado. También dispone de un menú sin gluten.
Dirección: Via Arnaldo da Brescia, 3, 20159 Milán
Osteria del Binari
Si le gusta la idea de ir a un lugar donde cocinan como en casa, con cariño, abierto sólo para recibir a amigos y amantes de la buena comida en general, Osteria del Binari es su sitio. Fundada en 1972 en un antiguo club de ferroviarios, hoy es un básico de la gastronomía milanesa. Su ossobuco en gremolada es imprescindible: carne suculenta, risotto cremoso y un equilibrio perfecto de sabores. El dehor, uno de los más grandes de la restauración milanesa, es perfecto para las noches de verano.
Dirección: Via Tortona, 1, 20144 Milán
Trattoria da Tomaso
Pequeño restaurante familiar milanés, la Trattoria Da Tomaso es un bastión de la cocina tradicional local desde 1961. Su ossobuco es un triunfo de sabores: carne suave y sabrosa, risotto perfectamente al dente y gremolada fresca y fragante. Su ubicación, justo debajo del Bosco Verticale, crea un fascinante contraste entre tradición y modernidad.
Dirección: Via Gaetano de Castillia, 20, 20124 Milán